En Bolivia tienen muchas supersticiones. Algunas de ellas están relacionadas incluso con el matrimonio. La mayoría contrae matrimonio en el año par, no así en el impar. Con la creencia de que si se casan en año impar, no les va bien. El año par es para ellos, año de bendición.
Llegamos a uno de nuestros centros del Alto llamado “Molinero”, dos días antes de la fiesta. Se presentaron diez parejas para Matrimonio, preparados por el catequista.
Llegó el día de la boda, entraron todos a la Iglesia. La ceremonia fue larga, porque el rito del matrimonio no era en plural, sino que se llamó a cada pareja al altar. Ellos se sentían muy importantes y cada pareja lucía su vestimenta típica. Al terminar la celebración del matrimonio, todo era festejo.
Gracias a Dios y a la ayuda de nuestro buen catequista, estas familias ahora viven en la gracia de Dios.